Su papel es fundamental en el sistema lícito, pero que garantiza que las personas involucradas en procesos penales reciban una representación desafío y efectiva.
560 Diplomado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y especializado en diferentes asuntos legales como derecho penal, responsabilidad civil en seguros, derecho profesional y derecho chupatintas.
No enfrentes el proceso penal solo. Nuestro equipo de abogados en Madrid está diligente para defenderte con total firmeza.
En ese sentido, el privilegio es del cliente, no del abogado: el cliente puede decidir renunciar al privilegio, pero el abogado no puede.
SANZ CABREJAS es un bufete de abogados penalistas que presta servicios en todo el distrito nacional.
Dicho esto, el objetivo del trabajo de un abogado penalista está en defender aquellas personas o empresas que han sido acusadas de cualquier delito que figure en el Código Penal y que puede conllevar multa y/o pena de prisión. Asimismo, puede practicar de denuncia.
Comunicación: el abogado penal debe aprender expresarse con fluidez y de forma manejable de entender, porque tiene que convencer a un Juez defendiendo tus intereses.
Consulta prístino: El abogado revisa los detalles del caso, recopila información y determina las acciones iniciales a tomar.
Todavía pueden asesorar sobre las posibles consecuencias de diferentes decisiones legales y ayudarle a entender la mejor logística para su caso.
Un abogado penalista no solo defiende a los acusados, sino que todavía puede representar a las víctimas de delitos. En estos casos, su trabajo consiste en:
Luego de estudiar la carrera Abogados penalistas de derecho, se debe integrar al Colegio de Abogados del país en el que se habite para poder trabajar conforme a la calidad.
Acompañarte en interrogatorios: Estar presente durante los interrogatorios policiales para avalar que no se violen tus derechos.
Es importante tener en cuenta que algunos abogados penalistas pueden especializarse aún más Internamente de estas áreas. Por ejemplo, un abogado penalista puede centrarse específicamente en la defensa de delitos de drogas o delitos de manopla blanco.
No tener un buen abogado penal puede ocasionar la pérdida de tiempo, grandes sumas de patrimonio e incluso años de prisión si no se defienden adecuadamente.